El peso mexicano se deprecia mientras persisten los temores de recesión en EE.UU.

El peso mexicano abrió este lunes con una cotización de 20.23 unidades por dólar, tras una ligera depreciación durante las operaciones nocturnas, donde llegó a operar en 20.18 unidades. La caída del peso es atribuida a la incertidumbre económica en Estados Unidos, que ha desatado temores sobre una posible recesión. A medida que el dólar muestra signos de recuperación y los bonos del Tesoro de EE.UU. se estabilizan, los inversionistas están buscando refugio en la moneda estadounidense, lo que ha afectado las monedas emergentes, incluida el peso mexicano.

El contexto de debilidad macroeconómica en Estados Unidos, reflejada en datos recientes sobre el empleo y el crecimiento económico, ha generado un clima de incertidumbre en los mercados globales. Los bonos del Tesoro a 10 años en EE.UU. se mantienen con una rentabilidad de aproximadamente 4.22%, lo que refleja el riesgo percibido en los mercados. En paralelo, los futuros de los índices bursátiles en EE.UU. han caído, arrastrando a los mercados globales hacia la baja.

Mientras tanto, la cotización del petróleo también muestra signos de debilidad, con el barril de Brent cayendo por debajo de los 70 dólares. Esta situación aumenta el atractivo del oro como refugio seguro para los inversionistas, que han incrementado la compra del metal precioso, cuyo valor se acerca a los 2,910 dólares por onza.

Este entorno económico global incierto podría continuar presionando la cotización del peso mexicano y afectando el panorama económico para México. Las decisiones de política monetaria y las medidas comerciales que tome Estados Unidos en las próximas semanas serán claves para determinar la dirección del mercado cambiario.